Emiliano Insúa

Destinado a ocupar el lateral izquierdo de la selección argentina por muchos años, Emiliano Insúa no se lo pensó dos veces ante la llamada de Rafa Benítez y se marchó al Liverpool procedente de las categorías inferiores de Boca Juniors. Aunque sí que ha debutado con el primer equipo, de momento aún no ha recibido suficientes oportunidades para demostrar que tiene un hueco en la primera plantilla del equipo. Seguro que en cuanto le den la confianza no defraudará y se ganará un lugar en el once inicial.

Nacido en 1989 en Argentina, es internacional en categorías inferiores por su país, y junto a otros talentosos compañeros como Federico Fazio, Matías Cahais, Ever Banega, Ángel Di María o Sergio Agüero se proclamó vencedor del Mundial sub20 del 2007. Emiliano fue en todo momento imprescindible para su selección, y bajo mi punto de vista personal, el mejor lateral izquierdo de todo el torneo.

Insúa suele actuar de lateral izquierdo aunque también puede rendir de manera sobresaliente de defensa central. De unas condiciones físicas impresionantes, es un futbolista extraordinariamente fuerte y potente. Mide 173 cm y pesa 82 kg, lo que puede dar una idea de su musculatura (ya que no está gordo). Zurdo de buena técnica individual, es muy complicado de sobrepasar en jugada individual. Su defensa de los unos contra uno resulta la mayoría de ocasiones brillante. Sabe colocarse de forma acertada sobre el terreno de juego (es muy bueno en la lectura táctica de las situaciones) y demuestra mucho ímpetu y una gran convicción en cada una de sus acciones. Sobrio y sólido, siempre da la cara y jamás se esconde: es raro verle hacer un mal encuentro. Derrocha mucha fuerza en su forma de actuar. A pesar de ser de un perfil defensivo, está más que capacitado para sumarse al ataque con peligro. Muy potente, cada vez que se suma a situaciones ofensivas da sensación de peligro, aunque aún debe mejorar en la precisión de sus centros al área y tratar de ser algo más productivo una vez ha hecho la proyección ofensiva. Poseedor de un duro y peligroso disparo a puerta. Siempre calmado, sabe ser firme y agresivo sin resultar violento. Además, tiene una personalidad fuerte y competitiva. De central también da muestras de seguridad, muy limpio a la hora de robar la pelota y atento en todo momento, además de tener una muy buena velocidad punta. Aunque no es excesivamente alto sí que es bastante bueno en el juego aéreo. Sin lugar a dudas se trata de un jugador muy completo y con condiciones para convertirse en uno de los mejores del mundo en su demarcación. Tarde o temprano lo será, yo apuesto por ello. Me encanta.

Fotos: www.viewimages.com, www.afa.org.ar