Claudio Marchisio

Interior o mediocentro italiano muy completo y capaz de aportar tanto en labores ofensivas como defensivas. Nacido el 19 de enero de 1986 y perteneciente a la Juventus, lleva dos temporadas consecutivos demostrando un altísimo nivel, el primero en la Serie B con la Juventus, y la campaña pasada ya en la Serie A, disfrutando de muchos minutos de juego en el Empoli como cedido, donde compartió equipo con otros prometedores italianos como Davide Bassi, Lino Marzoratti, Ignacio Abate o el genial Giovinco. Internacional en categorías inferiores con la selección italiana, actualmente con la sub21, no debería tardar en llegar a la absoluta, tiene nivel de sobra para ello.

Pienso que su demarcación ideal es la de interior por cualquiera de los costados (preferiblemente en un esquema tipo 4-3-3), aunque también se desenvuelve con acierto como mediocentro. Claudio es uno de esos futbolistas que todos los entrenadores quieren tener en su equipo. Actitud irreprochable dentro del terreno de juego, competitividad, ambición, sacrificio, saber estar, inteligencia, dominio de las transiciones, lectura del juego, ... todo esto y mucho más es lo que tiene Marchisio. No es un futbolista que enamore a primera vista sino que se hace notar con el paso de los minutos hasta resultar imprescindible, desde luego a mí me tiene encandilado. Diestro de buen manejo de su pierna izquierda, buenísimo a nivel técnico y muy completo en todos los aspectos del juego. Trabajador incansable, aporta mucho recorrido y posee una notable capacidad de pase y visión de juego, así como una alta velocidad en carrera, gran cambio de ritmo y buen regate, que le capacitan para intentar la jugada individual en caso de no ver las cosas claras. Su disparo desde media distancia es extraordinario, tanto con la derecha como con la izquierda, cuando prueba lo hace con mucha potencia y colocación, debido a ello es un futbolista capacitado para anotar 8-10 goles por temporada. Constante y rápido, es muy agresivo e intuitivo en la presión, muy complicado de sobrepasar. Además destaca por su capacidad táctica y para leer el partido, es disciplinado y casi siempre está donde debe, aporta tanto en ataque como en defensa. Sobresaliente especialista de las transiciones, tanto ofensivas, con rápidas y directas conducciones de balón e inteligentes pases al espacio, como defensivas, acertando a la hora de ir al “tackle” y realizando faltas tácticas en caso de ser necesario. A pesar de ser muy delgado y tener un aspecto frágil, es todo lo contrario, sabe utilizar su cuerpo de forma extraordinaria y es duro como una roca. Si hay que “dar cera” no duda en hacerlo, lo suele realizar de forma que el árbitro no pueda visionarlo con claridad, sin que se note en exceso. Domina el juego subterráneo. Dinámico, con empuje y llegada, le gusta realizar continuas incorporaciones al ataque. También sobresale por su carácter ganador y luchador. Con criterio y muy equilibrado, quizá le falta capacidad de genialidad y algo de calidad técnica –aunque no es malo en este aspecto, ni mucho menos- para resultar más determinante en el aspecto ofensivo. En algunos momentos también “desaparece” del partido y a veces tiene pérdidas de balón peligrosas, debido a su juventud es algo comprensible.

Sobresaliente futbolista de equipo, no llama excesivamente la atención aunque su labor es imprescindible y tremendamente eficiente para el equipo. Hace mejores a sus compañeros. Predilección personal, me encanta su forma de jugar. Recientemente disputó representando a Italia el Torneo Esperanzas de Toulon, donde fue pieza clave de un equipo donde sobresalían jugadorazos de la talla de De Silvestri, Cigarini, Giovinco, Lanzafame, Osvaldo o Pelle. ¡Que siga deleitándonos!



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