Imad Najah

Perteneciente a la cantera del PSV Eindhoven e internacional en categorías inferiores por Holanda, aunque con raíces marroquíes, Imad es el prototipo de futbolista que cualquier entrenador desearía tener en su plantilla. En principio su demarcación ideal es la defensa central, preferiblemente en el perfil diestro, aunque su polivalencia y entrega le permiten rendir en cualquier puesto de la zaga. Participó en el Europeo sub17 del 2008 junto a otros prometedores compañeros como Jeroen Zoet, Ricardo Van Rhijn, Jerson Cabral o Geoffrey Castillion, ayudando al equipo a llegar a semifinales –fueron apeados por la selección española de Thiago Alcántara, a la postre vencedora- y erigiéndose como uno de los mejores defensores del torneo. Para mí el mejor en su posición.

Sacrificio, entrega, intensidad, garra, voluntad, actitud. Son adjetivos que perfectamente podrían ser utilizados para describir a Najah como futbolista. Se trata de un central que de todo lo que tiene sobre el campo, se esfuerza hasta la extenuación y rara vez baja los brazos. A pesar de no destacar por un cuerpo corpulento es fibroso y está fuerte, no duda en ir al choque, además tiene una alta velocidad punta en carrera que le permiten ir al cruce y a los balones divididos con relativas garantías de salir vencedor. Diestro, poseedor de una aceptable técnica individual, con el balón en los pies no se complica la vida: suele jugar de forma sencilla, si se ve apurado no duda en despejar el balón. Siempre concentrado y metido en el partido, se muestra muy serio, pegajoso y correoso en la marca, además de peleón y sacrificado. Uno de esos futbolistas de los que el atacante rival suele acabar harto. Además, tácticamente es bastante inteligente, y sobretodo tiene un gran sentido colectivo: siempre está atento por si tiene que realizar una cobertura al lateral de su zona o a su compañero en el eje de la zaga. Todo un futbolista de equipo. Se muestra agresivo en el “tackle” y decidido una vez va a realizar la entrada; es contundente y no suele andar con contemplaciones. Por lo tanto, se trata de un jugador muy bueno en la defensa individual. A pesar de no destacar por su altura sí que sobresale en el juego aéreo, tiene una gran capacidad de salto. Sin llamar la atención siempre ofrece un rendimiento muy alto y lo que es más importante; hace mejores a sus compañeros, destacando especialmente por sus coberturas y ayudas. Bajo mi punto de vista puede que le falte algo de cuerpo, carencia que sobretodo se puede notar ante delanteros corpulentos y que sepan jugar de espaldas, aunque lo suple con su sacrificio y determinación. También en ocasiones se le echa de menos algo más de serenidad, aunque en este caso tampoco creo que sea algo excesivamente negativo ya que ello le sirve para estar metido en el partido. Es cierto que hay ocasiones en las que se precipita. Técnicamente no está excesivamente dotado –aunque no es malo para ser central-, no obstante sabe de sus limitaciones y no suele abusar de la retención de balón. Quizá le falte una pizca de calidad. Aún debe formarse un poco más, sobretodo a nivel físico, pero lo cierto es que el chico promete.

Nacido en 1991, en la actualidad forma parte de los equipos de categorías inferiores del PSV, siendo el capitán y ejerciendo de líder en muchas ocasiones, ya que otra de sus cualidades es que demuestra mucho carácter y personalidad sobre el terreno de juego y no se amilana ante nadie. Además, por condiciones y cualidades también está capacitado para ofrecer un alto rendimiento en la demarcación de lateral derecho. Imad Najah, no tengo ninguna duda de que su futuro está en el fútbol profesional. Jugador de los que siempre suma, veremos hasta donde es capaz de llegar.

Fotos: www.psvjeugd.nl